Renuncio a la habitabilidad de la vida
y al silencio extraño a las cinco y cuatro
el grillo del descampado sigue como siempre
esta silla me aplasta el culo
me recojo el cabello en una cinta.
si puedes
sonríe como el chico negro que trabaja en el puerto,
carga y descarga.
Todos estos años convertidos en ceniza
la canción que cantamos
en el refugio
con todo aquel miedo de niños.
FOTOGRAMA DE UN INSTANTE por MAICA BERMEJO MIRANDA
-
La mano, pequeña y blanca, descansa laxa entre los dedos morenos del hombre
que viaja a su lado. Los dos, relajados, se dejan mecer por el suave
traquete...
Hace 10 horas