Otro puto día de mi vida, abriré mañana los ojos y veré la pared desconchada a esa misma altura (esa pared que yo me encargué de destrozar con mis uñas mientras hablábamos por teléfono hace ya, parece, dos mil años).
FOTOGRAMA DE UN INSTANTE por MAICA BERMEJO MIRANDA
-
La mano, pequeña y blanca, descansa laxa entre los dedos morenos del hombre
que viaja a su lado. Los dos, relajados, se dejan mecer por el suave
traquete...
Hace 10 horas