Dejé todas las exigencias en viejas cajas junto a las plantas
Las plantas murieron despacio, una tras otra, una tras otra
las hojas cayeron blandas, como ausentes
Yo, me separé de mi misma y ensanché mis caderas, tomé cuerpo
(demasiado, tal vez)
Olvidando las viejas cajas, llenas de
exigencias y violencia, de estrecho campo de acción
olvidé mi belleza y llegados a este punto, crei
que retomar esta serie de atributos por los que era conocida
servía más bien de poco.
Así que sin tenerme lealtad ninguna, me arrastré y sucumbí
ante una gran estupidez, que venía en forma de borrón
y cuenta nueva.
Todo agigantado por mi pequeñez de espíritu.
Bueno, de qué sirve todo esto me pregunto.
DEL FONDO: UN VIAJE AL FIN DE LA NOCHE
-
“Del fondo” surgen las visiones más aterradoras, pero también más
fascinantes. Surgen las preguntas más angustiosas, pero también las
respuestas más neces...
Hace 12 horas
2 pulsaciones:
Quizás sirva para que la luna te de mordiscos todas las noches.
Besos.
sirve para comprobar que, efectivamente, tenías sangre en las venas
Publicar un comentario