Con un rotulador indeleble me pondría en la frente la palabra "muralla" y después correría a entrenarme en algunas artes milenarias para derruirlas a puño cerrado y mirada elevada. Tal vez bastaría con un poco de disolvente, pero suelo hace las cosas complicadas más por idiotez que por placer.
Tienes cara de haber venido a buscarme.
LA LABOR DEL TERMINATOR: Tomás Soler Borja.
-
*Tríptico al óleo del alma humana *
Cuánto de lascivia, de onanismo
público, indisimulado, cruel
y tantas veces goloso
en los poetas y sus cantos
―d...
Hace 1 día
0 pulsaciones:
Publicar un comentario