Solo quedan restos de resaca después de todas las cosas que pasaron pero ya-no-pasan. La vida r e a l es mañana en el furgón de camino a cualquier parte leyendo el pais semanal. Trabajar, lavarme el pelo al llegar a casa. Observar, pensar en ojos que permanecen semiabiertos. La sensación horrible de tener que ocuparme de T O D O.
Y todo es todo: comida, ropa limpia, calentador roto (¿hasta cuándo podrá sobrevivir Bx sin agua caliente?), dar de comer a los animales, quitar el polvo, echar un polvo...
Veamos, para explicarme. ¿Cómo puedo soportarlo? Haría un esquema. Lo primero es que vivo y vivo paralelamente a otra persona, no hago mi vida con ella, sencillamente estamos en caminos distintos pero paralelos, desde los que nos saludamos y nos mandamos algún beso disparatado. A veces tenemos sexo concentrado en media hora escasa de: guarra puta zorra que coño tan hermoso tienes. Acabémos con esto- diría yo. Pero no se puede terminar lo que terminado está. No hay peleas, no hay discusiones. Después de descubrir que YA NO HAY NADA todas las puertas se abren y solo una se cierra para siempre. No se puede tener el amor todo el día en un tubo de ensayo. No se puede estar probando siempre lo mismo para ver si sabe diferente.
Y en realidad nada es tan horrible, ni tan necio. Sencillamente es n a d a .
Y el que nada no se ahoga - Otra mentira más.
LA LABOR DEL TERMINATOR: Tomás Soler Borja.
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*Tríptico al óleo del alma humana *
Cuánto de lascivia, de onanismo
público, indisimulado, cruel
y tantas veces goloso
en los poetas y sus cantos
―d...
Hace 1 día
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