Yo sé de qué va esto, vaya.
Lo fácil es engañarse y pensar que todo
seguirá siendo siempre igual o que incluso mejorará..
Que esos pequeños trofeos que tenemos encontrarán una cajita preciosa donde guarecerse.
Pero cariño tú sabes que
hay cosas que vuelan desde las ventanas hasta el suelo
algunas caen como plumas otras parecen pesados sacos
y caen en línea recta o al menos eso parece desde la ventana.
A nosotros
de pequeños
nos gustaba tirar globos de agua desde el séptimo
pero aquellos cabrones de enfrente nos superaban
arrojando su propia mierda a aquel vacío inmenso
que era la calle.
La conclusión es que después de eso
de sentirte un rey arrojando cosas desde lo más alto
y de sentirte independiente subido en tu bicicleta camino
de ninguna parte
después de eso sólo se puede ir
cuesta abajo.
Y lo mismo pasa con cada día que perecemos juntos
mirando sorprendidos
la pequeñez abstracta de una fantasía ridícula
la muestra singular de un pequeño trozo de vida
que pareció real que pareció "lo que tenía que ser"
No quiero romperlo todo y decir que
algo se ha perdido,
sencillamente quería reflejar lo efímero de
la calidez, del orgullo, de las manos que no se cansan,
del murmullo infatigable de una conversación.
Es lo mismo que el pensamiento aquel de que
el amor había de durar como mucho
dos años.
Con eso también quise creer que me equivocaba.
Fue duro, supongo.
Un dia abrirse así.
De golpe.
LA LABOR DEL TERMINATOR: Tomás Soler Borja.
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*Tríptico al óleo del alma humana *
Cuánto de lascivia, de onanismo
público, indisimulado, cruel
y tantas veces goloso
en los poetas y sus cantos
―d...
Hace 1 día