Con la vieja moto fuimos a robar panochas
tu me decías que el camino no acababa nunca que parecía que
se repitiera una y otra vez.
Todo eran naranjos.
Habíamos fumado esa hierba tan buena de tu primo
y teníamos hambre así que la mejor opción
era robar las mazorcas y asarlas en tu casa
hacer unas brasas y después acostarnos con la ventana abierta
yo mordiéndote las manos y tú haciéndo figuritas con el dedo en
mi barriga.
Pastor nos recordaba a Victor French.
LA LABOR DEL TERMINATOR: Tomás Soler Borja.
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*Tríptico al óleo del alma humana *
Cuánto de lascivia, de onanismo
público, indisimulado, cruel
y tantas veces goloso
en los poetas y sus cantos
―d...
Hace 1 día