Salgo a la calle. Se quema mi frente y esa señora
parece ridícula enfudada en ese traje de chaqueta.
Mi nuevo y prodigioso color de piel hace las delicias
de obreros y médicos con gafas.
Tengo en los ojos el brillo y la seguridad
de quien ya no ostenta nada.
No tartamudeo, aunque juraría que ayer
me sentí como si de repente
la garganta se aburriera de ser perfecta.
Nada es irrealizable, nada infranqueable.
Aunque
No te impresiono, no te conmuevo, no te seduzco
no te convenzo.
Has sido práctico te anticipaste a la pesadilla.
Aún así
Dame autorización y me alistaré en tu piel
como si fuera una gran misión.
Imputame un crimen, perdóname.
Soy excelsa, soy osada.
He rescatado del sumidero
lo idealista, lo positivo.
La perversidad de la bondad.
Con una caida de ojos.
¿PLANEA USTED ATENTAR CONTRA EL PRESIDENTE DE LOS EE.UU.?
-
En 1993, con 18 años, fui por primera vez a Estados Unidos. Viajaba con
destino a California con la intención de pasar allí un mes entero. Antes de
aterr...
Hace 5 días
0 pulsaciones:
Publicar un comentario